Coons Ransom Maine Coon Cattery
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Last Updated November 27th, 2024
Aquí hay un gran artículo sobre la displasia de cadera en gatos. El estudio se realizó específicamente en Maine Coons, ya que la tendencia es criar gatos más grandes.
https://phys.org/…/2019-11-hip-dysplasia-cats-hereditary-co…
La displasia de cadera en gatos es hereditaria y más común en individuos más grandes
por la Universidad Sueca de Ciencias Agrícolas
Radiografía de un gato con caderas normales y un gato con displasia de cadera grave. Crédito: SLU
Probablemente millones de gatos en el mundo
sufre de displasia de cadera, pero este gato
El problema de salud rara vez se ha estudiado.
. En un estudio recientemente publicado con un
centrarse en el "gigante gentil" Maine
Raza Coon, concluyen los investigadores de SLU
que la condición es hereditaria y es
más común en
gatos grandes. El estudio también mostró que
el programa de salud sueco ha sido
eficaz para reducir la incidencia de
displasia de cadera en la raza a través
crianza selectiva. El hallazgo de que
los gatos más grandes tienen más probabilidades de tener cadera
displasia sugiere cría para el
tipo de cuerpo grande lleva consigo el
riesgo adicional de displasia de cadera.
La displasia de cadera es bien conocida y estudiada
en perros. Pero este nuevo estudio, ahora
publicado en Scientific Reports, es el estudio más grande basado en datos de gatos y el primero en examinar la heredabilidad de la enfermedad.
Hace unos 20 años, el programa de salud para gatos Maine Coon comenzó en Suecia. Una de las razones fueron los primeros indicios de que la raza podría tener problemas de displasia de cadera. Y resultó ser el caso; La displasia de cadera fue relativamente común, con aproximadamente un tercio de los gatos afectados. La iniciativa vino de Suecia pero hoy se incluyen gatos de todo el mundo. El programa en sí es único porque se centra en los gatos; otros programas de salud para la displasia de cadera están dirigidos principalmente a la cría de perros.
"Queríamos ver si el programa estaba surtiendo efecto o si debíamos cambiar algo. Me preocupó que todavía tuviéramos una proporción tan grande de gatos con displasia de cadera", dice Åsa Ohlsson, investigadora del Departamento de Genética y Reproducción Animal. , SLU.
Pero después de 20 años del programa de cría, el número de gatos nuevos con displasia de cadera examinados era tan alto como cuando comenzó el programa, lo que sugiere que tal vez no estaba funcionando. Pero cuando el investigador de SLU Matt Low examinó las estadísticas basadas en el parentesco genético, vio que el programa era efectivo. Los gatos que se originaron en individuos criados de acuerdo con las recomendaciones del programa de salud tuvieron una menor incidencia y gravedad de la displasia de cadera en las generaciones posteriores. Las razones por las que este patrón no fue obvio al observar simplemente la cantidad de gatos con displasia de cadera fue que muchos gatos nuevos provienen de un entorno en el que sus padres no han sido evaluados previamente. Además, esta raza de gatos en general se ha ido haciendo más grande, lo que resultó ser una pista importante.
"Cuando analizamos por primera vez los datos, vimos la conexión entre los grandes felinos y la displasia de cadera. Fue entonces cuando decidimos observar las correlaciones genéticas entre los genes del tamaño corporal y los de la displasia de cadera. Descubrimos que a medida que la raza aumenta de tamaño, sus caderas empeoran. Esto indica claramente que probablemente no sea una buena idea promover tamaños corporales más grandes en su reproducción ", dice Matt Low, investigador del Departamento de Ecología, SLU.
Los criadores de gatos de todo el mundo han esperado ansiosamente los resultados de dicho estudio. Es probable que el hecho de que la displasia de cadera sea hereditaria y esté genéticamente correlacionada con el tamaño corporal sea controvertido, ya que los gatos Maine Coon grandes son premiados en exposiciones porque el estándar actual de la raza enfatiza este gran tamaño corporal. Pero hay buenas noticias en el sentido de que la incidencia de displasia de cadera se puede reducir con programas de salud y cría selectiva, tanto para los criadores como para los propios gatos.
"Nadie quiere que sus gatos sientan dolor. Sin embargo, puede ser difícil notarlo. Los gatos son mucho mejores para ocultar el dolor que los perros. Los signos importantes a tener en cuenta son si el gato se mueve menos o es más cuidadoso en sus movimientos que como era de esperar. También pueden evitar saltar sobre una mesa o el mostrador de la cocina, por ejemplo, debido al dolor en las caderas ", dice Åsa Ohlsson.